JORNADA DE PESCA Nº 770
TIEMPO PRESENTE: BAJO LA TORMENTA POLÍTICA.
Sigo reportando partes de pesca en este, nuestro blog, con más de dos meses de retraso. A la hora de ponerme a escribir el que hace referencia al último sábado de octubre del año pasado, en concreto la víspera de Todos los Santos, han pasado ya las fiestas navideñas, y poco después de Reyes ha estallado en Catalunya una nueva tormenta política, esta vez de gran magnitud, al lograr la mayoría parlamentaria independentista investir un presidente y formar gobierno, después de tres meses de rocambolescas negociaciones,
La política nos depara tiempos turbulentos en este recién estrenado 2016. Pintan bastos para la moderación y el diálogo, y el escarnio a la democracia es ya moneda común en todos los bandos en litigio. Todo y así, no es objetivo de este blog el enzarzarse en cuestiones allende de la pesca, todo y que las decisiones de los gobernantes, sean quienes sean, acabarán por afectar, tarde o temprano, a los pescadores, a los ríos y con ellos a los habitantes de sus aguas.
Por suerte, los peces siguen allí, como lo estaban dos meses y pico atrás, en el que fue mi último día de pesca en Pedret hasta el momento.
PASADO "PESCAIMPERFECTO": FIN DE FIESTA MUY DISCRETO EN EL PEDRET OTOÑAL
En el transcurso de la última semana de octubre, tuvo lugar la última de las sueltas de truchas del Plan de Repoblaciones Piscícolas en Pedret y, creo, también en todas las zonas de pesca intensiva controladas del Principado.
Como viene sucediendo cada año, desde que en 2006 el coto del Pedret pasó a ser intensivo, todo es terminar las repoblaciones que, seguramente porque también deja de pasar la vigilancia fluvial, las truchas materialmente se volatilizan. Para muestra, un botón: apenas dos semanas después de esta última repoblación, mis amigos de la peña "Salvando el Bolo" fueron a pescar a Pedret y consiguieron capturar una sola trucha, entre cuatro pescadores, a lo largo de una larga jornada.
Sabedor de esta "misteriosa" desaparición de las truchas, de desgraciada periodicidad anual, ya desde el año pasado decidí cerrar mi propia "Temporada de Pedret" la misma semana en que echasen la última cuba, y luego... pues ¡hasta marzo y tan amigos!.
Bien sea en materia de pesca, política, fútbol u otras cuestiones, procuro evitar enfadarme, dado el inútil gasto de energía y desgaste para la salud que ello supone. Y sobre todo, procuro no discutir según con quién, dado el riesgo que ello supone para el bienestar mental. En definitiva, he decidido hacer caso a Mark Twain, que aconseja que nunca discutamos con idiotas, pues nos bajan a su nivel, y allí nos baten por experiencia.
Ya me gustaría a mi, todo y el frío que hace en esa gran hondonada umbría que es Pedret, poder pescar en este coto a lo largo del invierno, pero prefiero ahorrarme el dinero de un caro ticket de intensivo (en diciembre caduca mi carnet de socio anual, y por temas burocráticos no lo vuelvo a tener operativo hasta finales de febrero, o principios de marzo) para ir a tentar una cantidad residual de truchas, tras la masacre que cada año llevan los mismos orcos descerebrados de siempre, a la que no se vigila el río.
Al fin y al cabo, para ir a salvar el bolo están, durante el "off-season" las zonas libres de ciprínidos; esas mismas en las que también hay una cantidad presuntamente residual de truchas; esas mismas de las que tan tabú es hablar y que tanta irritación genera en algunos (que se creen dueños de la mismas, por algún inexplicable "derecho de conquista") el que se publique cualquier mínima información sobre ellas. En fin, lo dicho anteriormente: que cada día le hago más caso a los sabios consejos de Mark Twain.
Supongo que son muchos los pescadores que también hacen la despedida de Pedret la semana en que se hace la última repoblación, pues el viernes, justo después de la suelta semanal, de acuerdo con lo que me informó el guardia de Catalana Forestal (en este caso, Josep), se vendieron cerca de ¡setenta tickets, la mayoría con muerte!
Dado que a lo largo de la edición de este año del "Pedret Otoñal", sobre todo por las obras del puente entre túneles, había pescado solo las zonas baja y media del coto, decidí hacer mi despedida en la parte alta, todo y que es la más frecuentada.
Cumpliendo las previsiones, y como suele ser habitual, la parte alta del coto estaba llena de pescadores, lo que me hizo añorar la soledad y la paz de las apacibles jornadas de septiembre y principios de octubre pasados, tal y como los lectores habrán podido observar en artículos anteriores. Pese al gentío, aguanté mas de media jornada en esa zona tan transitada y pisada, hasta que a primera hora de la tarde decidí cambiar de latitudes, en busca de una paz y una soledad que tampoco terminé de encontrar río abajo, pues parece ser que en esta jornada eran muchos los pescadores que se citaron en Pedret, supongo que para hacer su particular despedida.
Con tanto trajín y ajetreo, ya desde el día anterior, las pocas truchas que daban la cara estaban nerviosas y resabiadas. Dado el bajo caudal del río, en un día soleado y templado de los muchos de esta guisa que nos ha regalado el bonancible otoño del año 2015, preferí pescar largo con tándems de seca y ninfa, ninfas pequeñas en solitario, o directamente a mosca seca, en tablas y bajíos antes que ir a rascar fondos de pozas con ninfas tungstenizadas.
Al poco de empezar, capturé con el perdigoncillo rojo del tándem una trucha irisada de repoblación que, al fin y a la postre, sería la única mykiis del día. Quedaban muy pocas "gladiadoras fluviales" en el "circo de captura y fríe de Pedret", y las pocas que quedaban estaban presas de un terrible stress.
Presionado por la gente, que ocupaba las posturas que quería pescar, fui subiendo hacia la zona estríctamente sin muerte, aguas arriba del puente románico. Incluso aquí encontré pescadores ejerciendo el derecho que otorga el pago del permiso. Todo y así, al final encontré una balsa, aledaña a la pasarela de cemento, en la que se veían moscardear pequeñas farios.
Supongo que las pintonas juveniles, todo y ser fruto de repoblaciones recientes, visto el estado de sus aletas, habían estado muy presionadas, pues no acababan de picar con la facilidad que cabría esperar. Dispuesto a pasar un rato al menos entretenido, rehice un poco el bajo de línea y fui disminuyendo el tamaño de la mosca, hasta acabar pescando con una efémera verde de parachute, en un anzuelo del 20, con la que conseguí capturar tres de esas truchas poco más que "palmeras", hasta que vino un señor ataviado de mosquero, con un amigo suyo equipado con una cámara de vídeo para filmar la acción de pesca, al que cedí gustosamente la postura. Realmente, me estaba estimulando bien poco tanta devanadura de sesos para tan poca recompensa, y aún menor tensión de líneas.
Hacia el mediodía me dí una buena caminata de vuelta al coche, bajo un sol que más parecía de principios de septiembre que no de la víspera de Todos los Santos. Visto el panorama de la parte alta del coto, decidí ir a probar suerte más abajo del puente del antiguo ferrocarril, recientemente restaurado.
En la misma tabla querenciosa, que tantas alegrías me había dado en mis últimas jornadas en Pedret en este otoño, terminó mi edición anual del "Pedret Otoñal" con mas pena que gloria. Con muy poca actividad en superficie, terminé pescando largo con una sola ninfa hasta que, por puro aburrimiento supongo, una incauta fario, afortunadamente de al menos 10 cms. más que las capturadas horas antes, terminó embocando una pequeña, ínfima, ninfa de color violeta previo entablar una batalla que perdió nada más entrar en mi salabre. Game over! trucha liberada, con la pena de pensar que probablemente será pasto de orcos, y fin del partido. Bye, bye Pedret... salvo imprevistos, ya nos veremos el año que viene.
La merienda, otra vez en Cal Rosal, tuvo un poco de sabor de despedida. Al fin y al cabo, a la hora de escribir este artículo os diré que a la semana siguiente volví a merendar en el mismo bar, tras comprar las mismas cocas en el mismo comercio, pero en esa ocasión ya no venía de pescar, sino que volvía de excursión a la Sierra de los Rasos de Peguera con mis compañeros del Centre Excursionista del Tagamanent i Cingles de Bertí. Y es que, para que el invierno no se me haga demasiado largo, entre salvada y salvada de bolo (o incluso entre bolo y bolo), he ido alternando la pesca con el senderismo, como es costumbre en mi en los meses de los días cortos y las temperaturas frías, cuando unos tantos prefieren el confort de la chimenea trabajando al torno de montaje, y otros muchos prefieren revivir las batallas de la temporada anterior, en esos escaparates de la más banal vanidad en que se han convertido las redes sociales.
JORNADA DE PESCA Nº 770
Sábado, 31 de octubre de 2015
Temporada 2015 - 2016 - Nº 5
Temporada de Cotos Intensivos de Salmónidos 2015 - 2016 - Nº 5
Coto Intensivo del Pedret - LL03 A/B
Río Llobregat
Modalidad del ticket: sin muerte
Pescador: Ferran RUBINSTEIN
Capturas: 3 truchas fario a mosca seca, 1 trucha fario a ninfa y 1 trucha arco-iris a ninfa
Equipo de pesca a mosca:
Caña: Vision GT four - 9 pies - línea 5
Línea: Adams 6 WF - flotante
Carrete: Adams Deimos
Climatología: soleado y templado
Caudal: medio-bajo
Hora de inicio de la jornada: 09,30 h.
Hora de finalización de la jornada: 16,45 h.
La música de hoy:
Viaje de ida:
Sinfonía nº 6
"Una fiesta eslava"
Alexander Glazunov
Concierto para violoncello y orquesta en "DO" mayor
Eugene d´ Albert
Viaje de vuelta:
Sinfonía en "FA" sostenido
Erich W. Korngold
Suite de Baile
Franz Lachner
Líneas Tensas!
Ferran RUBINSTEIN.