sábado, 9 de junio de 2012
JP-611. COTO DE RIPOLL - CAMPDEVANOL S. M. - TE-09B. Sábado, 09/06/2012.
JORNADA DE PESCA Nº 611.
PARECIDOS RAZONABLES, PERO ENGAÑOSOS.
A priori, podría parecer que la jornada de pesca de este sábado en Ripoll, pescando los antiguos cotos de Ordina y Font Viva, fué un calco de la del pasado sábado en Campdevanol, haciéndolo en los Freser 1 y 2 -la misma mañana soleada, el mismo cielo gris sin llegar a llover ni una gota a partir del mediodía, el mismo caudal alegre del a menudo sediento Freser, incluso el mismo número de truchas capturadas y soltadas, un largo lapso de horas- y sin embargo hay ciertas diferencias marcan un diferente nivel de satisfacción a la hora de recoger trastos y dar por finalizada la jornada, para ir a merendar, en este caso a otra pastelería.
La mañana "de postal", no fué ni por asomo, tan calurosa como la de la semana pasada; es más, la tuve que empezar con manga larga. Tampoco la tarde bajo un cielo plomizo fué tan bochornosa como la de la semana pasada; incluso se levantó algo de aire a partir de las dos. Y por lo que hace a las truchas, que seguramente eso es lo que estáis esperando que os cuente, la misma cantidad cantidad que la semana pasada puede ser un dato muy engañoso, pues las de esta semana si dieron la talla, no tan solo en el combate, sino también en el tamaño: de las seis, cinco pasaron de los 35 cms., y sólo una quedó un poco por encima de lo que podríamos llamar "trucha palmera".
La jornada se estructuró en dos tramos dentro de los dominios pescables que el coto tiene sobre el Freser, uno dentro de los que serían los limites del antiguo coto de Ordina, y el otro, sensiblemente más corto, dentro de los de Font Viva, o sea, el hoy extinto sin muerte de Ripoll.
ARRANCADA DE CABALLO Y PARADA DE BURRO EN ORDINA.
El haber capturado una señora trucha en la salida del canal de la hidroeléctrica, nada más comenzar a pescar, haber fallado la clavada de otra que subió al tricóptero del tandem, y volver a capturar otra trucha apenas unos metros aguas arriba, me hizo pensar que la jornada podría ser gloriosa.
Sin embargo, y como suele decir el refrán "arrancada de caballo, parada de burro". O lo que es lo mismo, a partir de ese episodio de actividad, no volví a clavar otra trucha hasta casi dos horas después, y tan lejos de alli como en las corrientes que hay por encima del area de picnic de la Font de la Rosa. Y con estas tres capturas, iba a terminar mi recorrido por Ordina, antes de marchar ha hacer una segunda manga plenamente urbanita dentro del casco urbano de Ripoll.
La verdad sea dicha, es que tuve que lidiar con varios contratiempos que alteraron mis planes. O supongo que esa es la excusa para justificar haber pescado poco en este tramo.
En el paso angosto del muro de la factoría Conforsa había ya dos pescadores faenando, por lo que se esfumó la posibilidad de pescar "en primicia" un trecho muy querencioso del coto, en donde a menudo obtengo muy buenos resultados. Para no molestarles, tuve que dar un largo rodeo, y cuando volví al río la actividad fulgurante del principio de la jornada se había esfumado.
Al llegar a la explanada de la Font del Roser, unos operarios estaban aspirando una cantidad ingente de pelusilla de chopo. Era tal la nube de dicha algodonosa semilla que levantaban, que me fué imposible pescar los aledaños de la esplanada, y perdí la oportunidad de aprovechar el tiempo en otro buen tramo más de río.
Como dije más arriba, la tercera captura de esta primera manga llegó en las corrientes que hay antes de la presa. Al llegar a la tabla que hay antes de que comience el límite del refugio de pesca por paso de presa, una mala entrada en el río hizo que saliesen de casi debajo de mis pies unas cuantas truchas que estaban "de panching" en la comodidad de poco más de un palmo de agua calentada por el sol.
Quizás si el caudal del río hubiera sido un poco menor, me hubiera arriesgado a dar un rodeo para acceder a la parte superior de la presa, y seguir pescando hasta por lo menos la entrada a Campdevanol, pero tanto el mal estado de mis suelas (¡sigo sin encontrar tiempo entre semana para cambiarlas!), como la posibilidad de un vadeo de riesgo me hicieron desistir de tal proyecto, para finalmente volver a mis intenciones iniciales, y probar suerte en el tramo urbano de Ripoll, o sea el antiguo coto sin muerte de Font Viva.
TIEMPOS PASADOS, QUIZÁS SI QUE FUERON MEJORES EN FONT VIVA
El cambio de escenario lo llevé a cabo mediante una caminata bajo el sol de primera hora de la tarde, todo y que no tardaría el cielo en cubrirse, y en quedar gris pero sin llegar a llover en ningún momento, como fué el caso de la semana pasada. Quizás en el caso de este sábado, el grado de humedad fué bastante menor, debido posiblmente a que se levantó un tanto de aire entre las dos y media y las cuatro de la tarde.
Aproveché la circunstancia de pasar por delante de mi coche de nuevo, para beber una lata de te con limón frio de la nevera portátil, y de paso rehacer aparejos. Seguí confiando en el tandem de seca y ninfa, pero la verdad es que convenía rehacer terminal y nudos.
Este tramo de la tarde fué más corto en longitud que el de la mañana, pero quizás más intenso en emociones, todo y que el balance final fué nuevamente de tres truchas, dos de ellas de muy buen porte, siendo la tercera la de menor longitud de entre las capturadas en este día.
A la mitad del exiguo recorrido, siempre sobre el Río Freser, y cuando llevaba dos truchas capturadas, fuí a dar un paseo para chafardear por el Ter, que ahora es zona libre sin muerte, y más que nada para ver si había algo de actividad por arriba y podía pescar un rato a seca, ni que fueran bagras.
Tras un rato de deambular mirando pero no pescando, vi señales de cebas esporádicas en unas aguas paradas que hay un poco más arriba del puente metálico. Estuve tentando lo que fuera que se cebase, fueran truchas o bagras, durante largo rato, y de paso practicando posadas y lances, y a cambio sólo tuve una subida a la mosca de algo que apenas llegué a revolcar, pero que se soltó enseguida.
Perdida la batalla de la mosca seca por este día, volví trama urbana a través a pescar el último mini-tramo que me quedaba pendiente, desde el puente del ferrocarril hasta el puente peatonal del Raval de Barcelona.
Fué entonces cuando me dí cuenta de lo realmente cambiado que está este sector del Coto, más aún que en mi primera visita de la presente temporada, el día de la inauguración. La poza que queda por encima del puente de la calle del paso a nivel ha desaparecido casi por completo, colmatada por sedimentos, y no se veía ni pizca de actividad en superficie, cuando hace años y en tardes de bien avanzada la primavera como la de ayer, era un hervidero de peces cebándose con frenesí. ¡Cuan buenas epscatas había hecho en ese reducido espacio!. ¡Cuantas emociones, y cuan grandes y luchadoras truchas habían sucumbido aquí ante mis imiotaciones flotantes!. Espero que esto sea algo pasajero, y que quizás cuando el nivel de agua baje un poco volverá la actividad a esta coordenada del coto, todo y que ahora su aspecto sea tan distinto. De lo contrario, comenzaré a pensar -muy en contra de mi optimismo habitual- que los tiempos pasados si que fueron mejores en Font Viva, y de que quizás si sea cierto que la plaga del cormorán ha hecho estragos en este río.
La anécdota divertida del día, llego a tocar del punto final. Un señor desde lo alto del puente peatonal me "chivó" que una trucha de buen tamaño estaba pegada al fondo, justo al lado del pilar. Fuí lanzando el aparejo siguiendo las instrucciones del improvisado colaborador, y al final comseguí que la pintona tomase mi ninfa, y que ttras una breve pero intensa batalla, me sirviese de modelo fotográfico antes de ser devuelta al agua. Por supuesto, le dí efusivamente las gracias a ese buen hombre, que quizás fuera un pescador que ese día, por las circunstancias no había podido acudir a su cita con el río y con los peces.
Como colofón a la jornada, y aprovechando que estaba en Ripoll, fui a merendar a la siempre excelente pastelería Can Junyent, a ver si con un par de pasteles se me iba el mal sabor de boca virtual que me había dejado el ver el mal estado del que fué uno de mis rinconcitos de pesca favoritos en el microcosmos fluvial del entorno urbanita de la ciudad de los dos ríos, Venecia pirenaica y cuna de la Nació Catalana.
JORNADA DE PESCA Nº 611.
Sábado, 9 de Junio de 2012.
Coto de Ripoll - Campdevanol S. M.
Ríos Ter y Freser.
(pesca solo en el Ter en esta jornada).
Tramos pescados:
Mañana y mediodía:
En Ripoll, desde la pasarela metálica de la hidroeléctrica hasta la presa del Pla d´Ordina..
Tarde:
En Ripoll, desde la confluencia con el Ter hasta el puente peatonal del Raval de Barcelona.
Capturas:
6 Truchas fario a ninfa (3 en el tramo 1, y 3 en el tramo 2).
Climatología: mañana: soleado y templado; tarde: nubes altas y templado.
Hora de inicio de la jornada: 09,00 h.
Hora de finalización de la jornada: 16,45 h.
La música de hoy:
Viaje de ida:
Concierto para piano y orquesta en "DO" menor
Obertura-Concierto en "FA" mayor
Joachim Raff
Concierto para piano y orquesta nº 2
Alexander Glazunov
Viaje de vuelta:
Sinfonía nº 4 "La víspera de Pascua"
Josef B. Foerster
"Canción sobre las Grandes Llanuras"
George F. MacKay
Líneas Tensas!
Ferran RUBINSTEIN.
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