"Si, al igual que yo, sois de los que creeis que tenéis poco que enseñar, mucho que aprender y aún más que compartir, éste es vuestro blog".

domingo, 9 de septiembre de 2012

JP-624. COTO DE OLIANA INTENSIVO S. M. SE08 - Sábado, 08/09/2012.




JORNADA DE PESCA Nº 624

EL PRIVILEGIO DE PESCAR CON UNA ENCICLOPEDIA ANDANTE DE LA PESCA CON MOSCA.

Antes de empezar a narrar las peripecias de una jornada de pesca muy rica en ellas, debo darle las gracias a mi amigo Carles Vivé, con quien tuve el placer de compartir nuevamente un dia de pesca, por la enorme paciencia que tuve que invertir conmigo mientras me hacía el "training" de pesca con ninfa avanzada, pues este pasado sábado tuve un día realmente torpe, de los que de no ser porque Carles me conoce, otra persona en su lugar pensaría que ha ido a pescar con Mr. Bean, y no con Ferran Oliva, alias "Rubinstein".
Como ya he dicho en alguna ocasión anterior, siempre es un enorme placer ir a pescar con Carles, pues es una auténtica enciclopedia andante de la pesca con mosca. Este sábado, siguió sorprendiéndome con opiniones que harían erizar los pelos del lomo de más de alguna "vaca sagrada" del mosquerío en los tiempos 3.0. Es por ello, por lo chocante de sus puntos de vista sobre la praxis de la pesca con mosca, e incluso en su modo de como entenderla, que a la que el tiempo me lo permita voy a dedicarle un artículo-entrevista en este nuestro blog de los pescadores de charca. 

LA MAÑANA MÍSTICA DE TIANAMMEN

A diferencia del sábado de la semana anterior, también en Oliana, el calor empujó el mercurio hasta los 31 º C a primera hora de la tarde, cuando hacía apenas una semana a la misma hora se disfrutaba del confort de unos primaverales 22 ºC. En esta ocasión, hizo ya calor desde primera hora de la mañana: nada que ver los 21 º C mientras montábamos el equipo, con los no ya frescos sino fríos 9º C de la semana anterior al acabar de desayunar. Creo que este calor, todo y que es normal dado que aún estamos en verano, influyó bastante en la apatía de las truchas, sobre todo en las horas centrales del día.
Por la mañana, Carles y yo estuvimos pescando las aguas someras de esa gran planicie llamada "Camí de l´Oliva", un escenario nunca fácil, y menos para los amantes de pescas abisales, ametrallamiento checo-polaco del río o pescas aceleradas para dar gusto al pulgar pulsando el contador de aforo reconvertido en cuenta-peces.
Esas horas de la mañana, bajo el sol de un verano que se resiste a decir adiós, fueron para mi lo mejor de una jornada que luego resultaría un tanto accidentada: pesca tranquila, sin prisas y sin aglomeraciones (cada día, y "gracias" a la crisis las hay menos, dado el insultante precio de los carburantes). Carles, más de cien metros por debajo de mi posición, pescaba a seca en el centro mismo de una tabla inmensa, y yo, más arrimado a la orilla del muro de la antigua piscifactoría, prospectaba la muy rala corriente con un tándem.
Perdí dos truchas casi seguidas ¡sigo con mi maldición particular en Oliana!, antes de verme sorprendido por una picada brutal de un barbo que huyó como un torpedo río arriba. Me llevó un buen rato dominar a la bestia, sudando tinta de calamar por la adrenalida, visto lo visto con las dos vice-capturas anteriores, hasta que conseguí ensalabrarlo: un bigotudo de cerca de 40 cms., muy simpatico el.
El único incidente desafortunado que enturbió esta mañana de paz y pesca en traqnuilidad, fué que perdí el bastón de trekking que utilizo para vadear. Se me escurrió de las manos, creyendo que ya había sujetado con un mosquetón a mi chaleco, y se fué corriente abajo. Curiosamente, Carles lo vió pasar muy cerca suyo, aguas más abajo, y penso "mira que guarra que es la gente, que hasta hecha bastones de hacer senderismo al río", cuando, de golpe y porrazo se dió cuenta de que aquel palo rojo con mango de foam negro era... mi impovisado bastón de vadeo, Demasiado tarde, y por poca que fuera la corriente, ya no le dió tiempo a ir en pos del mismo.
Poco después del medidía horario (que no solar), hacía ya un calor de mil demonios. Carles vino en mi búsqueda, para mirar de convencerme de ir al coche a tomar un refresco de la nevera portátail, propuesta que acepte de muy buen grado. Mientras yo había estado disfrutando de la paz mística de una de las esquinas  de la Plaza Tianammen de Oliana, el había clavado, en medio de la misma, tres farios de muy buen porte a seca.         
Tras el paréntesis refrescante, decidimos cambiar de aires, e ir a pescar las corrientes que hay un poco más arriba de las pozas del puente de Tragó.

INTERLUDIO DE CALOR, BAÑISTAS, PESCADORES DE AQUÍ Y DE ALLÁ, Y BARBOS BIGOTUDOS.

Gran algarabía y jolgorio en las pozas del puente de Tragó: al menos media docena de chavales, en bañador, se lo estaban pasando en grande bañándose en el río. Este año si que se ha notada un incremento de bañistas fluviales, pese a los peligros que siempre entraña bañarse en el río, tanto Oliana, como en Pedret, e incluso en el Aragón Subordán a su paso por la Selva de Oza, tal y como pude observar durante las vacaciones de verano. Es normal: la crisis está obligando a la gente a mirar los gastos con lupa, e ir a la piscina, todo y las garantizadas medidas de seguridad e higiene, se ha visto sustituido por el remojón en la poza, todo y el peligro que entrañan los remolinos y el amarillento color del agua que desemboca en el río, procedente de algunos regatos próximos a granjas de cerdos u otras instalaciones agropecuarias.
Los primeros compases de nuestra prospección de las corrientes, esta vez ambos a ninfa, fueron bastante anodinos. De hecho, no se veía ni un mínimo de actividad. Sobre todo las truchas, debían estar haciendo la siesta. De repente, una brutal picada en el blando lateral de mi lado me despertó de golpe. Lo que fuera, emprendió una carrera meteórica río arriba, al tiempo que oía a Carles gritar "¡Eso es un barbo, seguro! ¡dale línea!¡dale linnneeeeeeeaaaaaaaaa, jodeeeeeeerrrrrr!.
Me ha pasado pocas veces, más que nada por mi costumbre de pescar, de modo preferencial,  truchas de plástico y otros engendros "de cuba", pero en esta ocasión, el bicho me sacó backing y no poco. En su loca carrera, el animal se perdió en el espumerío un caos de rocas enmedio de la corriente, y me temí
que se hubiera enrocada. Por suerte, noté el calambre típico de haber vida al otro la do de la línea, y me puse a recoger algo que parecía pesar como una caja de caudales. Tardé lo que parecía una eternidad en acercarlo a mi posición, sólo para que el pez ganase entonces la corriente abajo y se iniciase otra  pelea, con suelta de línea y backing incluído.
Para más desgracia, cuando habia conseguido acercarlo otra vez a mi posición, vi que mi linea, a la que con la excitación de la pelea y el paseo del pez río arriba y río abajo me había olvidado de recoger, estaba liada en un tronco semisumergido. Por suerte, Carles acudió al rescate, cruzó el río y no tan solo me desenredó la línea, sino que me ayudo a ensalabrar un estupendo y bigotudo barbo común de cerca de 60 cms.
Total, que si no hubiese sido por la ayuda final de Carles, hubiera estado en riesgo de perder el tercer cirpínido y segundo barbo más grande que pesco en Oliana. Sólo el que pesqué en Enero de 2.007, en aguas más paradas y con un hilo del 22 en vez de uno del 16, eso si, era más grande que el que acababa de pescar. También la bagra pescada hace casi un año, le sacaba a este barbo algo más de 10 cms.
Tras toda esta peripecia, y dado que las corrientes que prospectábamos ya estaban pescadas, y que en los parados inmediatamente siguientes estaban ocupados por dos pescadores, Carles me propuso que fuéramos a los chorros de la entrada de la poza de la gravera, y allí me enseñaría la técnica de pesca con ninfa pescando largo. Como no, la oportunidad de aprender algo útil en pesca a mosca no se puede desperdiciar, y menos viniendo de un maestro como Carles, así que acepté gustoso la proposición, aunque si llego a saber la de paciencia que tendría que gastar mi amigo, lo hubiera dejado para otro día.

Para ganar el camino de la orilla contraria del río, tuvimos que vadear cerca de los pescadores que estaban inmediatamente encima de nuestra posición. Al llegar a una distancia prudencial para que nuestro vadeo no les molestase, vimos que eran un chico y una chica. El chaval sobre todo, pescaba con bastante desenvoltura, y justo había hecho picar y peleaba una trucha justo en el sitio en donde la semana anterior me habían dado julepe a mi durante casi una hora larga. Más tarde, tendríamos tiempo de conocerlos a ambos, pescadores de La Rioja de vacaciones en Oliana, y os aseguro que fué un auténtico placer.
En la famosa "poza de la gravera" o "del basurero", había bastante gente pescando, entre otros un señor con la familia en pleno picnic, que pescaba en bañador y a pie descalzo, alternando lances con una caña de mosca, con otros con cucharilla. Fué allí, o más bien en donde desemboca el chorro en la inmensa poza, cuando me encontre a los simpáticos, espontáneos y cachondos colegas de la "Imperial Tarraco", Moreti y Javiermosquero, con los que compartimos unas risas e incluso un cigarrillo. No les estaba yendo nada mal: Moreti estaba tocando escama con ninfa, y a Javiermosquero una imitación de escarabajo le estaba alegrando el día a él, y amargándoselo a las truchas, supongo, je, je, je.


INTENTANDO SACAR ALGO DE PROVECHO DEL RECLUTA PATOSO.

En las corrientes que hay encima mismo de la siempre tan querenciosa como sobrepescada "poza de la gravera", pudimos por fin comenzar el training. Justo antes, y en algunos lances que habíamos hecho, Carles había perdido tres picadas y tenido que rehacer el aparejo al enganchar un tronco sumergido, y a mi se me había escapado una trucha, tras haberla peleada más de cinco minutos... con la consiguiente cara de tonto que se me quedó cuando creía que se la podría enseñar a Moreti, a quien tenía pescando casi enfrente de mi.
Pero estaba visto que este sábado era un día de pesca realmente gafado para mi, pues justo vadeando el fuerte tiro de corriente del chorro de entrada a la poza, esta vez sin mi bastón de vadeo, tuvo el inevitable resbalón y el consiguiente remojón, leve esta vez, pero con la tocada de cAjones de remojo total de paquete de tabaco, por lo que iba a pasar un buen rato de abstinencia.  
El ejercicio en esta ocasión, correspondía a un "tactical" conocido como pesca con ninfa lanzando. Antes de empezar, os diré que este tipo de pesca, dentro de las muchas posibilidades que ofrece la pesca con sedal pesado, difiere totalmente, o más bien está en las antípodas de como más se pesca a ninfa actualmente en España, y creo que en Europa, o sea "al hilo" con caña larga de entre 10 y 11 pies.
Para el ejercicio, equipé un bajo de línea no muy largo, con dos ninfas (Carles siempre pesca con una, pero me permirtió esa concesión), y un indicador de picada. Si, si, eso mismo, un indicador de picada, de esos de bolita roja, que hoy por hoy, y para muchos pescadores recalcitrantes de la ninfa es puro anatema. Es más, durante todo el día, y también durante el ejercicio, estuvimos pescando con un bajo trenzado, otro de los temas "tabús", y que tantas fobias genera. Eso es lo más soprendente: un pescador que lleva treinta años pescando a mosca, que ya pescaba a mosca cuando eso para la inmensa mayoría de msoqueros actuales nos sonaba a cuento chino, que ha pescado en muchas latitudes y muy diferenrtes peces, llega ahora y rompe un par de lanzas por dos instrumentos a los que un buen porcentaje de la parroquia mosquera considera "para novatos". ¿·Eso funciona?, pues bien, a mi no me quedo ninguna duda el pasado mes de Julio cuando Carles sacó 14 farios casi seguidas, en una zona libre que no ha visto repoblación alguna, mientras que yo, com mis "checo-polacas", mis "tungstenidas" y mis perdigones de tándem no veía una mísera picada. Es más, me consta que siguiendo la estela de mis artículos, algún que otro lector ha vistado esa zona libre, obteniendo resultados de lo más desalentadores.
Sobre todo, lo que determina la picada, no de la trucha repoblada, sino de la trucha que es del río o se pueda haber asilvestrado, es lo muy natural que derive la ninfa bajo el agua. Hay una creencia, falsamente extendida, de que la pesca a ninfa es más fácil que la pesca con mosca seca, y eso es un terrible error. Por supuesto, es mucho más fácil en escenarios con trucha repoblada, pero en donde hayan truchas que no han comido pienso en su vida, las cosas cambian y mucho. Por tanto, un factor que ayuda en la deriva lo menos forzada de la ninfa es el tan denostado indicador de picada (artilugio que, al contrario de lo que sucede en España y en Europa, es muuy utilizado en Estados Unidos), y sobre todo, lo que es determinante, es que la cola de rata jamás arrastre ninfa y señalizador, por tanto, una vez hemos posado bien, o sea, primero la ninfa y luego el señalizador, enseguida ¡la caña arriba!.
Evidentemente, mover un aparejo de ninfa y señalizador, no es lo mismo que mover un tándem de seca flotona con un pedigoncillo, o pescar con mosca seca. Aquí se trata de lanzar lejos pero sobre todo usando rodados y rodados laterales, lances en los que tengo muy poca pericia, de tan mal acostumbrado que estoy a pescar "al hilo". Además, con el susto anterior y el cansancio que arrastraba, tenía la muñeca muy floja, así que comencé a lanzar fatal y a recoger arrastrando la ninfa, con lo que llegué casi a exasperar al pobre Carles, que se desgañitaba cada vez que separaba exageradamente el brazo del cuerpo, destensaba la muñeca, y sobre todo no "disparaba" la caña, concepto que el cree de los fundamentales en la parada delante del lance, muy "British" por todo lo demás, máxime cuando en el continente predomina más el concepto de "empujar" en el lance hacia delante más que de disparar en la parada, bien sea lanzando de frente o rodado.
La confirmación de que las teorías de Carles eran, nuevamente  y por supuesto, correctas vinieron tan pronto conseguí hacer derivar correctamente la ninfa por unas corrientes que parecían mudas y ausentes de vida: ¡una picada tras otra! Eso si, dos terminaron en revolcones y relámpagos de plata bajo el río, y la tercera ¡vaya truchón! en otro fiasco, pues la enorme arco-iris con la que me estaba peleando terminó zafándose de la ninfa y huyendo corriente abajo...ante el estupor y la bronca que me soltó Carles, que entonces invirtió parte de su tiempo en darme consejos para pelear truchas, que sinceramente apenas pude asimilar, pues en aquel momento, y después de las experiencias de la pasada semana y de la presente, mi autoestima estaba por los suelos, y creo que si hubiese tenido que pelear con un alburno clavado en el arpón de Moby-Dick lo hubiera perdido igual, tal y como pasó poco después con el último pez clavado y mal peleado del día, otro enorme barbo, que tras descontar casi diez minutos de tiempo útil de formación en otro duelo estéril, se desclavó de la ninfa cuando estaba a tocar del salabre.
Esta claro que más que un problema de nudos e hilos, tengo un par de serios problemas en esto de las peleas con grandes peces: uno con el freno del carrete, y otro a la hora de enfrentarme de un modo demasiado pusilánime con el pez, dejándole demasiado que haga lo que le de la gana, como si fuera él el que tiene las cogidas las riendas ede la situación, y no el pescador.
Se oyeron truenos en la lejanía. Enfrascados como estábamos con el entrenamiento, y las peleas con los grandes peces, no habíamos levantado la cabeza del río, y a eso de las cinco menos cuarto de la tarde, justo después de perder el que hubiera sido mi tercer barbo del día, nos dimos cuenta que se estaba formando una buena tormenta hacia el norte, por lo que decidimos salir del río y dar por terminada una jornada tan accidentada como excitante.  


LA PESCA CONTINÚA, AÚN CON LA CAÑA PLEGADA.
 
Esta visto que, para los recalcitrantes de la pesca, esta no termina ni aún habiendo guardado el váder y plegado la caña.
Mientras nos cambiamos, tuvimos ocasión de conocer en persona y charlar un buen rato con David y Altamira, la pareja de pescadores de La Rioja, con los que habíamos coincidido a primera hora de la tarde. Incluso prolongamos la conversación en uno de los bares del pueblo, y el chaval que está hecho un crack nos regaló unas emergentes de tricóptero e imitacionesde red tag con pelo de ciervo que pescan con sólo mirarlas.
Es un placer y un orgullo que el coto de Oliana goce de tan buen nombre allende de Catalunya. Al menos, ellos se lo habían pasado muy bien, y se llevaban una muy buena impresión del mismo y de sus peces.
De regreso a casa, y mientras merendábamos en La Panadella, la conversación de pesca siguió, y sólo se detuvo porque se me estaba realmente haciendo tarde para llegar a cenar a una hora razonable. En este caso, la tertulia derivó en un exhaustivo análisis de material, sobre todo de cañas y acciones de las mismas. Lo mejor de las opiniones de Carles es que están muy bien fundamentadas y rehuyen los tópicos "está bien", "no me gusta", "yo bien que me hincho a pescar con esa caña", "esa caña es un timo" o "te han tomado el pelo con tal modelo, la mía si que funciona bien". Al menos, Carlos conoce bien los pros y contras de cada modelo, la calidad de los blanks, la promenorización de la acción según el escenario, etc. Si más no, tiene un parque de cañas impresionante, y ha probado montones de modelos. Todo sea dicho, la caña con la que he vuelto a pescar en estos últimos tiempos, la Grauvell Titanium de 9,5 pies para línea 5 ha merecido por su parte un aprobado. No es una caña de élite, pero lanza con mucha dignidad lineas del 5 e incluso del 6. Al menos, si no ha aprobado el pescador...que apruebe la caña.
Espero contar con la colaboración de Carles en este blog pronto. Sus opiniones estoy seguro que no dejarán indiferente a la mayoría de lectores. Es más, alguno que otro las puede encontrar chocantes e incluso heréticas: estamos asintiendo con demasiada facilidad a los cantos de sirena de muchas autoproclamadas "vacas sagradas", estamos reduciendo el arte de la pesca a mosca en un simple capturar peces en el que casi todo vale, estamos mezclando churras con merinas con demasiada facilidad. Y además ¡que carajo! siempre es preferible oir algo que nos duela pero dicho desde la voluntada constructiva, que reiterarse en el halago fácil y en la cuantificación como expresión del éxito.

  

JORNADA DE PESCA Nº 624

Sábado, 8 de Septiembre de 2012

Temporada 2011 - 2012 - Nº 43
Temporada de Salmónidos 2012 - Nº 24

Coto Intensivo de Oliana S. M. - SE08 

Río Segre

Pescadores:

Carles Vivé
Ferran RUBINSTEIN

Capturas:

Carles Vivé:
3 truchas fario a mosca seca

Ferran RUBINSTEIN
2 barbos a ninfa.

Climatología: soleado y caluroso.

La música de hoy:

Viaje de ida:

Sinfonía nº 9 "Del Nuevo Mundo"
Anton Dvorák

Sinfonía nº 5
Charles H. H. Parry

"Cuatro últimas canciones"
"Cecilia"
Richard Strauss

Viaje de vuelta:

Sonata para piano nº 1
Sonata para piano nº 2
Anton Rubinstein

"Don Juan"
"Danza de los siete velos" (fragmento sinfónico de la ópera "Salomé").
Richard Strauss

"Variaciones Sinfónicas"
Charles H. H. Parry


Líneas Tensas!



Ferran RUBINSTEIN.

3 comentarios:

  1. Uno de los relatos que mas me.han gustado ultimamente. Espero con interés esa colaboracion de Carles, alguien que por tus palabras parece un tipo muy interesante.

    Saludos desde León

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    1. Amigo Oscar:

      Me complace mucho que te haya gustado el relato. Estoy seguro de que Carles puede aportar mucho a este blog. De todas maneras, estoy abierto a todo tipo de colaboración con mis queridos y respetados lectores y seguidores, y por tanto, si deseas publicar algún artículo aquí, en Rubinsteinfishing, siéntete como en casa de hacerlo.
      En el caso de estar interesado, sólo me has de enviar el mismo en un documento de Word, y las fotos (dos como máximo) como archivos .jpg, todo anexo a un correo electrónico a la siguiente dirección

      tagamanentberti@hotmail.com

      Como es una cuenta que no reviso a diario, puedes darme un "toque" por Facebook, a través de Rubinsteinfishing y Amigos, para decirme que has enviado una colaboración.
      Un abrazo y Líneas Tensas!


      Ferran.

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  2. hola, me llamo felipe, es la 1era vez q veo este blog. muy bueno
    soy argentino, vivo en barcelona hace 10años, y soy pescador a mosca desde hace 20 años en patagonia. cada verano voy alli a despuntar un poco el vicio...

    el motivo x el cual os contacto, es q estoy un poco desorientado con la pesca aqui en Cat. No doy con los sitios, las epocas, las lineas, las horas de pesca, permisos... ni tan solo doy en identificar los peces! he ido a angles y despues de 1h buscando esa trucha gorda q veia x alli abajo... me di cuenta de q era una carpa....

    me podeis ayudar?
    desde ya agradecido
    saludos, felipe
    felitrebino@hotmail.com

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